Preparar los ingredientes: Precalienta el horno a 180°C (350°F). En un tazón grande, aplasta los plátanos con un tenedor hasta obtener una consistencia de puré. Asegúrate de que los plátanos estén bien maduros para una mejor dulzura natural.
Mezclar los ingredientes secos: A la mezcla de plátano, añade la avena entera, los arándanos secos, las pasas, el coco rayado, y las nueces picadas. Mezcla bien para asegurar que los ingredientes secos se distribuyan uniformemente.
Añadir la vainilla: Incorpora la cucharadita de esencia de vainilla a la mezcla y revuelve bien para combinar todos los ingredientes.
Formar las galletas: Con la ayuda de una cuchara, toma porciones de la mezcla y colócalas en una bandeja para hornear previamente forrada con papel pergamino. Usa tus manos o la cuchara para dar forma a las galletas según tu preferencia.
Hornear: Introduce la bandeja en el horno precalentado y hornea las galletas por aproximadamente 20 minutos, o hasta que estén doradas y firmes al tacto.
Enfriar y servir: Una vez horneadas, retira las galletas del horno y déjalas enfriar en la bandeja por unos minutos. Luego, transfiérelas a una rejilla para que se enfríen completamente.
Disfrutar: ¡Tus galletas de avena con frutos secos y nueces están listas para disfrutar! Son perfectas para un desayuno nutritivo, como snack saludable a media tarde, o incluso como postre.
Notes
Para una textura más crujiente, puedes hornear las galletas unos minutos adicionales. Vigila de cerca para evitar que se quemen. Estas galletas se conservan bien en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 5 días, o puedes refrigerarlas para prolongar su frescura. Si prefieres las galletas más dulces, considera agregar un endulzante natural como miel o sirope de arce al gusto, ajustando las calorías totales por galleta según sea necesario. ¡Espero que disfrutes de estas deliciosas y saludables galletas de avena tanto como yo! Son una forma fantástica de satisfacer esos antojos dulces de manera nutritiva.